1- La adicción una enfermedad. Se la puede se la puede describir, tiene síntomas específicos, es crónica y progresiva.
2- Sus principales síntomas son:
a) Apetencias y actos incontrolados por el alterador estado de ánimo (drogas-alcohol).
b) Pérdida del control sobre su uso.
c) Persistencia en el uso, pese a sus consecuencias adversas.
d) Negación del problema.
3- La adicción no es el resultado de una debilidad moral o falta de fuerza de voluntad.
4- Como la adicción es una enfermedad, emplear argumentos razonables o lógicos frente a la persona adicta casi nunca sirve para convencerle de que deje la droga.
5- El adicto es incapaz de controlar la enfermedad.
6- La adicción afecta al usuario física y psicológicamente y en su conducta (pérdida de energía, cambios de humor, pérdida de autoestima, alteración de los valores).
Estos efectos deben ser contemplados como parte del proceso de la enfermedad.
7- El adicto no es responsable de tener la enfermedad adictiva, pero es responsable de su conducta y recuperación.
8- La enfermedad de la adicción es como una alergia no tratada. Estará siempre latente y la exposición al "alérgeno" producirá una reacción predecible.
9- La adicción dura toda la vida. Pero puede ser frenada, en tanto el adicto se abstenga de todo alterador del estado de ánimo.
10- La recuperación es posible, por lo tanto, con la abstención y un cambio de actitud, de estilo de vida y de conducta.
RASGOS DE PERSONALIDAD Y MODOS DE FOMENTAR LA ADICCIÓN.
Presentamos a continuación algunos de los mas frecuentes rasgos de personalidad de alto riesgo y una breve exploración de la forma en que cada uno de ellos hace a una persona más vulnerable a la adicción.
RASGOS DE PERSONALIDAD:
- Sentimientos de verguenza.
- Perfeccionismo: autocrítica implacable.
- Avidez de poder y control para compensar los sentimientos de impotencia y verguenza.
- Deshonestidad, autoengaño.
- Modo de pensar extremista, en blanco y negro.
- Obsesión con uno mismo.
- Carencia del sentido de sí mismo.
- Vacío interior.
- Carencia de significación y propósito.
- Excesiva búsqueda de aprobación; obsesión con la imagen.
- Autocensura.
- Sentimientos de culpa.
- Dificultades para controlar la ira.
- Depresión subyacente.
- Adormencimiento emocional.
- Tensión interior.
- Temor a asumir riesgos apropiados excesivo temor al fracaso y al rechazo.
- Necesidades de dependencia ocultas.
- Dificultades con figuras de autoridad.
- Inculpar a otros; asumir un rol pasivo de víctima.
- Escasa capacidad para afrontar las cosas.
- Expresión de deseos.
- No querer creer nunca.
- Falta de fronteras.
- Necesidad de gratificación inmediata.
- Problemas con la intimidad, sentimientos de soledad y falta de pertenencia.
- Dificultad para sentir placer real.
MODO EN QUE FOMENTA LA ADICCIÓN.
- La droga promueve sentimientos de adecuación y/o anestesia, el dolor que provoca la verguenza.
- La droga hace que la persona se sienta más perfecta o, en caso de drogas "aplacadoras", la libera de esforzarse por ser perfecta.
- La droga suministra la ilusión de tener poder y control y/o anestesia al usuario repecto de sus sentimientos de impotencia.
- Con la deshonestidad como "segunda naturaleza" es fácil que prevalezca la negación acerca del uso de la droga.
- El modo de pensar en blanco y negro induce al adicto a reaccionar exageradamente a los acontecimientos; los estados de ánimo negativos hacen tanto más atractivo el uso de la droga.
- La adicción es una obsesión con unos mismo, un incesante "lamerse las lágrimas"
- La droga es utilizada para "llenar el hueco" interior.
- La adicción suministra algo que hacer, un sucedáneo de la "dedicación".
- La droga ayuda a acopiar más aprobación ajena y/o anestesia al usuario respecto del rechazo.
- La droga ayuda a eliminar al sensor interno y le permite al usuario ser "el mismo".
- La adicción suministra un punto de referencia para la culpa, un modo de actuar en consecuencia.
- Las conductas adictivas proporcionan un terreno en el cual manifestar la ira o evadirla. En cualquiera de ambos casos, el adicto no tiene que hacerse responsable de ella.
- Los alteradores del estado de ánimo mantienen los entimientos al mismo tiempo que suministran actividad, crisis y sensaciones para contrarrestar los sentimientos de "inercia mortal".
- La adicción suministra una constante actividad o bien reduce la tensión.
- La adicción encubre el carácter temeroso de la persona, brindándole un "falso arrojo".
- La droga satisface necesidades en forma pasiva y como "por arte de magia", al mismo tiempo que suministra una fachada de independencia.
- Algunas adicciones representan la lucha del individuo contra la autoridad mientras otras (como la adicción al trabajo) parecen servir para ganarse la aprobación de esta.
- Culpando a otros, el adicto evita hacerse responsable de sus actos y se crea una excusa para recurrir a los alteradores del estado de ánimo.
- La actividad congela el tiempo, acorta la vida y suministra una vía de evasión de manera que el adicto no se ve obligado a afrontar los problemas.
- El autoengaño es un terreno fértil en el que se arraiga el mecanismo de defensa adictivo de la negación.
- La adicción ofrece una tierra de nadie en la que las necesidades del adicto son satisfechas sin ningún esfuerzo de su parte, su conducta no tiene consecuencias y él no se ve obligado a asumir ningún riesgo.
- La conducta compulsiva brinda un modo de evitar tener que fijar frontera.
- La adicción proporciona un arreglo rápido y seguro que el adicto cree "merecerse".
- La droga sustituye a la relación íntima, alivia los sentimientos de soledad y a veces suministra una seudocomunidad".
- La adicción proporciona un "seudoplacer".